Abstract
Gender-responsive budgeting (GRB) has been introduced in over 80 countries to mitigate gender inequities. We evaluate if these reforms can influence policy making and enhance gender-oriented accountability. Our analysis follows the process-tracing methodology and includes over 20 in-depth interviews. Our findings show significant public administration obstacles to GRB, but success is possible in institutions with proper leadership, human, and technological resources. This study advances our understanding of the operational limits of GRB, highlights areas for future research on equity-oriented reforms, and sheds light on issues that practitioners need to account for as they strive to further gender equity.
Resumen
El presupuesto sensible al género (GRB, por sus siglas en inglés) se ha introducido en más de 80 países para mitigar las desigualdades de género. En este estudio evaluamos si estas reformas pueden influir en la formulación de políticas y mejorar la rendición de cuentas orientada al género. Nuestro análisis se basa en la metodología de process-tracing e incluye más de veinte entrevistas en profundidad. Nuestros hallazgos muestran que debilidades de la administración pública resultan en obstáculos significativos para el GRB, pero también que las reformas de GRB pueden ser exitosas en instituciones con los niveles apropiados de liderazgo, recursos humanos y sistemas tecnológicos. Este estudio avanza nuestra comprensión de los límites operativos del GRB, destaca áreas para futuras investigaciones sobre reformas orientadas a la equidad y clarifica los obstáculos que los funcionarios públicos deben tener en cuenta a medida que se esfuerzan por promover la equidad de género.